Las tareas de mezclado son una parte importante del trabajo diario en diversas obras de construcción, ya que si se realiza de manera incorrecta puede dar lugar a resultados inaceptables o de muy baja calidad. Con la aparición de nuevas tecnologías, el mezclador de pintura se ha convertido en una solución frecuente, y en este artículo técnico hablaremos sobre sus tipos y el correcto uso del mismo. En otro artículo, hablamos también sobre sus usos y aplicaciones, específicamente.
Hemos visto, por ejemplo, las típicas hormigoneras o máquinas mezcladoras de cemento, también llamadas «trompos», que funcionan con motores eléctricos o a combustible, y cuyo tamaño varía desde los modelos portátiles de dos ruedas hasta los que van montados en camiones.
Sin embargo, cuando se trata de trabajos profesionales a menor escala, o incluso el que realiza el aficionado en su hogar, existen otros métodos y herramientas más sencillas, pero no por ello menos eficaces, para mezclar materiales de construcción líquidos y en polvo, tales como pinturas, mortero, adhesivos, tintes, lechadas, revoques y sustancias similares. Veamos cuáles son esos métodos y herramientas.
1) Lo básico: un elemento auxiliar
Es sabido que todo aquel que decide pintar su casa o negocio, o contrata un pintor para hacerlo, está familiarizado con una técnica antigua, pero aún aceptable: para mezclar la pintura, se retira la tapa del envase, se sumerge una varilla de madera, se remueve suavemente el contenido, opcionalmente se agrega diluyente y/o tonalizador, se sigue removiendo y finalmente se consigue el propósito buscado: la pintura queda homogénea y lista para comenzar a aplicarla sobre la superficie deseada.
Pero claro, estamos en el siglo XXI, en el que las invenciones y los adelantos nos tienden una mano. Porque si de una pintura ligera nos trasladamos a otros materiales más densos, como adhesivos, yeso, masilla, recubrimientos epoxi, pastas, esmaltes, resinas o mortero, entonces comprobaremos que el truco de la varilla de madera ya no funciona. Como los fabricantes de herramientas eléctricas se apercibieron de ello antes que nosotros, lanzaron al mercado unos dispositivos muy útiles que vienen a solucionarnos el problema.
2) Lo novedoso: un accesorio para taladro
Cuando presentamos el taladro, mencionamos que una de sus múltiples funciones es mezclar pintura y materiales afines. La increíble versatilidad del taladro está dada por la cantidad de accesorios que se le pueden acoplar. Y precisamente uno de esos accesorios son las varillas mezcladoras para taladro.
Estas varillas forman parte de las herramientas usadas para trabajos previos o de preparación de pinturas y demás materiales a aplicar. Consisten en un eje cilíndrico en metal galvanizado, que en un extremo tiene un encastre hexagonal para mandril (comúnmente, de 3/8, 1/2 y 5/8 pulgadas) y el otro presenta dos o más aspas accionadas por rotación mediante el taladro. Pueden tener diversos tamaños y formas, adaptables para agitar el contenido de envases desde pequeños hasta los más grandes. En las figuras de abajo vemos algunos ejemplos de diseño de varillas, así como su colocación en un taladro.
Por su parte, este video nos muestra una de estas varillas en pleno funcionamiento.
3) Lo realmente innovador: herramientas exclusivas
Es cierto que un taladro eléctrico común puede ser adecuado para mezclar pequeños volúmenes de materiales, principalmente líquidos, a bajas revoluciones (aproximadamente 500 rpm). Pero cuando debemos manejar volúmenes grandes o materiales de mayor viscosidad, ya no es la primera opción. Dado que un taladro está diseñado para funcionar durante solamente unos pocos segundos, el mezclado en estas condiciones hará que el motor se recaliente rápidamente e incluso se queme. Por otra parte, el funcionamiento prolongado de un taladro también producirá la fatiga del usuario.
Por lo tanto, la tecnología ha respondido a estas exigencias brindándonos herramientas alternativas que son muy poderosas y perfectamente indicadas para las tareas de mezclado de pintura, mortero y materiales afines.
Dependiendo del fabricante, podemos encontrar dos tipos de herramientas eléctricas para el mezclado de estos materiales.
a) Taladro-mezclador
Fuera de la línea convencional, este taladro está concebido especialmente para los aficionados al bricolaje que desean tener una robusta herramienta con cable que sirve para un doble propósito. Es decir, no sólo está diseñado para la mezcla de materiales líquidos y pulverulentos, sino que también se puede usar como taladro, porque viene provisto de un mandril portabrocas de corona dentada, así como de la función de rotación en avance y reversa.
Es muy cómodo de maniobrar gracias a un diseño tipo pistola, con un mango posterior y otro lateral, ambos antideslizantes, lo que brinda un sólido agarre. Cuenta con un arranque suave y los controles electrónicos integrados permiten preestablecer la velocidad y ajustarla con precisión.
En la figura siguiente vemos uno de los modelos de taladro-mezclador con sus componentes principales.
El taladro mezclador es una herramienta lo suficientemente potente (aproximadamente 1000 W) para manejar fácilmente el mezclado, el mandril puede alojar brocas o varillas mezcladoras de encastre hexagonal de hasta 1/2 pulgada (13 mm) y su velocidad de marcha supera las 500 rpm.
Generalmente los taladros-mezcladores que ofrecen las marcas reconocidas también incorporan en el kit una varilla mezcladora de pintura de tipo espiral, además de un accesorio para cambiar de varilla según la necesidad del usuario.
b) Mezclador
Estas son herramientas aún más dedicadas, ya que están especialmente diseñadas para la mezcla y no cumplen ninguna otra función adicional. Soportan un funcionamiento prolongado y usan varillas mezcladoras similares a las que acabamos de ver, desde el momento en que, según el fabricante, pueden presentar dos tipos de encastre:
- Hexagonal con adaptador especial para el cabezal del mezclador.
- Con una rosca métrica M14 (como muestra la siguiente figura), por lo que cualquier varilla que tenga ese tipo de rosca puede atornillarse sin problemas a estos mezcladores.
Los mezcladores de pintura y mortero son unidades eléctricas con cable, provistas de dos velocidades que llegan a unas 500 rpm (marcha 1) y 800 rpm (marcha 2), y un interruptor de encendido que puede bloquearse para obtener un funcionamiento continuo. También son muy potentes, ya que están generalmente equipadas con un motor de unos 1400 W que les permite alcanzar altos valores de torque o velocidad, de manera que la velocidad requerida para la mezcla puede ajustarse óptimamente a la consistencia del material a mezclar.
Las figuras de abajo representan un mezclador de pintura y mortero con sus componentes principales, así como la manera de usarlo.
Al igual que el taladro-mezclador, ofrecen un arranque suave y la velocidad puede preestablecerse y ajustarse con precisión gracias a los controles electrónicos integrados en la herramienta. Los mangos laterales son amplios y ergonómicos, permitiendo un agarre muy confortable que reduce la fatiga.
Las prestaciones de este tipo de mezclador de pintura, mortero y materiales similares benefician a albañiles, colocadores de revestimientos, pintores y hasta al usuario hogareño.
¿Cuál es la mejor manera de usar los mezcladores de pintura y mortero?
Para una tarea exitosa y para asegurar el máximo provecho y durabilidad de un mezclador de pintura es muy importante seguir la serie de consejos que presentamos a continuación.
a) Usar la varilla mezcladora adecuada
La forma del extremo agitador de la varilla varía según el material y/o volumen a mezclar, ya que materiales diferentes tienen requisitos de mezcla diferentes. Si usamos la varilla incorrecta, el material no se homogeneiza correctamente, creando grumos en la mezcla. Por lo tanto, nunca debemos emplear una misma varilla para mezclar materiales diferentes, por ejemplo, pintura, adhesivos, mortero o yeso, sino elegir la que sea adecuada para cada material o grupo de materiales afines. La figura que sigue sirve como guía orientativa acerca de los principales diseños de varillas mezcladoras, así como sus usos principales.
b) Usar un recipiente adecuado para mezclar mortero
Cuando elijamos un recipiente para la mezcla de mortero, debemos tener en cuenta la cantidad total de mezcla. Un recipiente demasiado pequeño provocará salpicaduras del material, ensuciando el entorno de trabajo y generando pérdidas innecesarias de material. Para reconocer el tamaño correcto del recipiente de mezcla, asegurémonos de que el extremo agitador de la varilla, una vez que introducimos esta en el recipiente, quede completamente cubierto por el material.
c) Usar la velocidad y el tiempo de mezclado adecuados
Si la velocidad del mezclador es demasiado baja, el o los componentes del material no se homogeneizarán correctamente y por lo tanto sus propiedades, una vez aplicado, no serán las buscadas. Lo mismo sucede si no damos el tiempo suficiente para un mezclado completo, lo cual se traducirá en un trabajo más prolongado, falta de adherencia del material, formación de huecos o cavidades, etc. Siempre conviene aumentar la velocidad de mezclado de manera progresiva a medida que el material va ganando homogeneidad.
d) Mantener la varilla mezcladora siempre limpia
Los residuos de materiales secos que quedan adheridos al extremo agitador de la varilla pueden desprenderse y contaminar nuevos materiales con partículas extrañas. Más aún, el depósito de capas sucesivas de material puede inutilizar completamente la varilla. Por lo tanto, prolonguemos la vida útil de la varilla mezcladora, ya sea teniendo cerca un recipiente con agua para sumergirla después de la mezcla (como observamos en el video) o bien rociarla con agua caliente para eliminar resinas, o limpiarla con un solvente indicado por el fabricante después de mezclar pinturas.
Con los cuidados correctos, podremos hacer buen uso de estos mezcladores de pintura, que ciertamente significan un gran ahorro de tiempo y dinero, mientras nos garantizan una óptima homogenización de los materiales para los que están diseñados.
3 Comentarios
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Piero
Estimado excelente articulo, tendras informacion donde se pueden encontrar los distintos tipo de varillas, en los retails solo hay el de pintura.
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ADRIANA GONZALEZ
Me interesa una mezcladora para pintura y sellador, de preferencia que pueda manejar manualmente y que también tenga base con cubeta para hacer la mezcla autoáticamente
daniel mendoza
hola buenas tardes cuanto seria el tiempo estimado para dejar la mezcladora en funcionamiento para mesclar para un producto de aseo